miércoles, 8 de mayo de 2024

SOBRE LAS APARIENCIAS

 El otro día una cliente nos pidió que le resolviéramos un problema de su edificio. Tienen goteras, han presentado el ayuntamiento documentación, planos y demás elementos de tortura para solicitar licencia y en el ayuntamiento les han dicho que todo lo que han presentado está mal porque, entre otras, cosas, eso lo tiene que presentar un técnico (un arquitecto en este caso) con la documentación correcta y con el visado correspondiente del colegio profesional que toque.

O sea que después de pedir licencia, hablan con el arquitecto, como es habitual.

La cosa es que me han enseñado la documentación que han presentado y, efectivamente, no cumple ni con la norma, ni con nada de nada, como es lógico, ya que no se dedican a esto de la aquirdocumentación, que es una disciplina en sí misma. Mi trabajo es hacerlo todo desde cero.

Concretamente, los dos planos que, se supone, estaban a escala y bien medidos, se parecen a la realidad... relativamente. Digamos que hay diferencias de medición de hasta medio metro. Además, no son planos técnicos y no aportan la información que tienen que aportar: dimensiones, cotas, secciones constructivas, tipos de material, modificaciones respecto al estado original, etc.

Estos planos los ha hecho una (valiente) vecina que es diseñadora gráfica y que sabe de dibujos, pero no de planos. 

Se los he enseñado a una compañera, también arquitecta, y me ha dicho que son planos muy bonitos. Que le gusta mucho lo de los colores que tienen y la composición y todo eso. Mi respuesta ha sido de estupor: son dibujos que no valen para nada a nivel profesional. No son planos. Serán composiciones, representaciones artísticas, cuadros coloridos... lo que quieras, pero no son planos. Es más, gracias a esos "planos" el constructor hace lo que le da la gana con el presupuesto, la norma se la pasan por determinado sitio, el ayuntamiento abre un expediente, los vecinos se enfadan, la autora se lleva un chasco inaguantable, etc, etc, etc.

Pues me ha dicho que le da igual, que tienen colores muy bonitos y que le gustan.

El debate ha seguido un rato y no lo voy a desarrollar, pero todo esto me lleva a pensar en la cultura de la apariencia y cómo nos está ganando terreno a marchas forzadas. Da lo mismo que te desgañites mostrando la realidad, que si las apariencias de algo que no sirve para nada son interesantes, serán la siguiente realidad. Con todo, en todos los ámbitos y a todos los niveles: hay que APARENTAR. ¿Que luego todo sale mal y tienen que venir los que saben a resolverlo? Da lo mismo, ya se arreglará, lo importante es ese primer golpe de apariencia.

Y así nos va.

Quizá si pusiera otro tipo de letra, con colorines, un par de gráficos y alguna cosita de esas que se mueven para llamar la atención, alguien leería esto que acabo de escribir, pero, total, para la pinta que tiene...